Se acerca Halloween una de las noches más terroríficas del año, también conocida como Noche de Brujas. El caso es que, a estas alturas, de brujas una ya está curada de espanto, ahora hay otras situaciones muchísimo más espeluznantes:
1-Los “te quiero” a las dos semanas de conocerte. ¡Ay, sólo de recordarlo se me ponen los pelos como escarpias! Eso sí que hace que salgas corriendo despavorida sin mirar atrás y no la visita sorpresa de un inspector de Hacienda.
2-Que un niño te llame “SEÑORA”.
3-Que tu madre te envíe una solicitud de amistad en Facebook. Y lo que es peor, empiece a colgar fotos de tu adolescencia (acné y mal corte de pelo incluidos).
4-Decir “una caña y a casa” y que sea verdad.
5-Cruzarte con Camilo Sexto sin maquillar (o maquillado, lo mismo da) en un callejón oscuro y poco transitado.
6-Cualquier centro comercial en el primer día de rebajas, si has sobrevivido a esto sabes que la única peor situación posible en la que puedes verte es en un Apocalipsis zombie.
7-Que la moda de las barbas dé paso a la de las perillas.
8-Conocer a la madre de tu chico. Toda suegra que se precie está programada genéticamente para odiar a su futura nuera por muy maravillosa que esta sea.
9-Despertarte tras una noche cargada de Jäger e infinidad de excesos, girarte, abrir mucho los ojos sorprendida al tiempo que piensas “¿Quién es este y qué hace en mi cama?”.
10-Que el chico tan mono que conociste la noche anterior te envíe un “Ola Ke Ase” por WhatsApp.
11-Que te deje tirada el coche en una carretera secundaria una noche en la que caen chuzos de punta y encima te pille sin batería en el móvil.
12-Que el muro de tu Facebook empiece a llenarse de fotos de bodas y de bebés. Ha llegado el momento, debes cambiar de amigos.
13-Quedarte en casa un sábado por la noche.
14-El “sold out” o “agotado” en tu talla de cualquier prenda de la que te hayas enamorado, sobre todo cuando se trata de las colecciones cápsulas que grandes diseñadores crean para H&M.
15-Los “tenemos que hablar” de ese noviete con el que llevas ya más de 6 meses.
16-Que a tu Smartphone le quede sólo un 3% de batería. Oh, my God! Eso sí que da miedo y no una peli japonesa de terror.
17-Los “se te va a pasar el arroz” y el consiguiente sermón que tienes que aguantar en las comidas familiares en casa de tus padres.
18-Cruzarte con tu ex precisamente el día que te has ido a hacer una limpieza de cutis.
19-Tu cara los domingos por la mañana mientras desayunas ibuprofeno con café, maldices ese gintonic de más (y todos los tequilas a los que te invitó el camarero) y juras no volver a beber nunca (al menos hasta el próximo fin de semana).
20-Los “¡Hernández, a mi despacho!” de tu jefe nada más entrar por la puerta de la oficina un lunes a primera hora cuando todavía no te ha dado tiempo ni a tomarte un café.
21-El momento previo a hacerte un predictor y que sólo salga una rayita o eran dos… Por qué no podrán cosas como “Sí, se te han acabado las fiestas por una buena temporada” o “Ya puedes dejar de rezar y celebrarlo con Moët, no estás embarazada”.